Poligamia, amor de tres, desgracia de dos y muerte de uno

Alguna vez has tenido la sensación de creer que estas en el cielo, sin el temor enorme de caer en cualquier momento?

Pues a mí nunca me había sucedido, lo experimente y  hasta que me di cuenta que me encontraba de picada, me dirigía al suelo sin escalas y a una velocidad tremenda, sentí ese pánico y esa adrenalina que hace que la sangre se suba  a la cabeza.

Algunas personas creen que no se puede sentir sentimientos poderosos por dos personas a la vez, yo creo que si y eso me ha hecho chocar fuerte contra el piso mas de una vez, sin contar el daño que he causado y del cual me arrepiento.

Hace algunos meses cambie de trabajo y conocí a alguien que parecía  especial, alguien a quien jamás me le acercaría con una doble intención, sin embargo esta persona fue quien tubo la iniciativa y sin pensarlo mucho accedí a probar algo diferente.

Teniendo yo una relación de tres años, trate de no ser un infiel ni engañar a nadie, intentando una y otra vez no sentir lo que empezaba a recorrerme, solo estuvimos juntos, a solas algunas noches, busque y busque sin encontrar motivos por los que no debería estar donde me encontraba en esos momentos.

Irremediablemente me estaba enamorando de alguien equivocado en una situación equivocada y en el peor momento.

  Tuve noches intensas y momentos interminables de placer, me sentía en el cielo, dos hermosas personas sentían amor por mi y yo por ellas, solo faltaba ponernos de acuerdo para que los tres iniciáramos proyectos de vida juntos, creo no haber sido tan tonto en mi vida, como se me pudo ocurrir algo así? Solo se trataba de placer en madrugadas frías.

Una de ellas conoció a un “amigo” y se fue con el. Que cosas y como cambian las situaciones, sufrí como si se hubiera muerto alguien muy querido, pero con toda sinceridad les deseaba que fueran muy felices aun que yo no lo fuera, por un momento sentí el coraje y la intención seria de competir, pero ya no le haría mas daño a mi pareja de tres años y no competiría contra uno de mis mejores amigos. Así que me retire y me refugie donde mas me sentí a salvo.

En fin han pasado algunas semanas desde lo sucedido y ya termine con mi tratamiento de antidepresivos, creo estar mejor, tengo planes con mi actual pareja, quien es una gran persona, hermosa y talentosa.

Estoy tratando de reparar los daños causados, pero entiendo que el errepentimiento no repara corazones quebrados.

Aun recuerdo esas palabras.. “te vas a arrepentir” y mira que a si sucedió, se que no viviré arrepentido y prefiero guardar esos momentos de antes de estrellarme con el suelo.

Me encuentro tranquilo y entiendo más que nunca, que todas las situaciones son lecciones que me hacen crecer y el hecho de haber sido un puente entre mi amigo y su actual pareja me hace convencerme cada vez más que las cosas y las situaciones son como deben de ser.

Por eso estoy tranquilo, me siento fuerte y con muchas cosas por hacer.